miércoles, 21 de enero de 2009

Noche Lunar.

Dime si acaso la luna es tan cruel
Al verme sonreír
Irónico de dolor y amor.
¿Acaso la noche menguante de un rojo sollozar
Puede comprender mi angustiado llanto?


Espíritus nocturnos me mecen entre sus brazos
Como un primogénito ingenuo y solitario.
El calor oscuro de un amanecer innombrable
Me da consuelos, sin nombrarme.

Noche estrellada, déjame ya de lastimar,
Muero, sucumbo aquí
A tus pies, ante tu imponente figura.
Nado en mares de corrientes confusas,
Espeso, voy marcando el paso de tus ojos,
Mirada negra que me mira sobre el hombro,
Rompiendo de amargura mi silueta desapercibida.


El recuerdo de tu pelo soñador,
Se tejerá de color bajo ese árbol de una vez,
Tatuaría en hilos de plata aquellas palabras
Que no quieren salir,
Muero inevitablemente por ti.


Noche estrellada, déjame ya de lastimar,
Muero, sucumbo aquí
A tus pies, ante tu imponente figura.
Nado en mares de corrientes confusas,
Espeso, voy marcando el paso de tus ojos,
Mirada negra que me mira sobre el hombro,
Rompiendo de amargura mi silueta desapercibida

No hay comentarios:

Publicar un comentario